Empresas modernas, el Buen Gobierno Corporativo

Empresas modernas, el Buen Gobierno Corporativo

El Gobierno Corporativo es el conjunto de normas que regulan el funcionamiento de los órganos gubernamentales de la empresa, a saber directorio, accionistas y alta administración.  

Es el sistema de dirección y control de las empresas a través de políticas y procedimientos que aseguren la responsabilidad, correcta dirección y transparencia en la rendición de cuentas a nivel corporativo.

Se trata de un concepto de mejores prácticas corporativas aplicable a organizaciones tanto públicas como privadas, familiares, medianas y grandes empresas por medio del cual, se buscan las estructuras apropiadas de gestión y control que éstas ameritan como parte integrante del sistema financiero.  

Un efectivo sistema de Gobierno Corporativo permite a la empresa la reducción de los riesgos empresariales dado que previene el incumplimiento de leyes y reglamentaciones, al tiempo que le permite operar eficientemente protegiendo sus intereses gracias a las políticas preventivas que minimizan la posibilidad de que sean materializadas pérdidas económicas en razón de conductas fraudulentas por el indebido uso de los recursos pertenecientes a la organización, monitorizando siempre la creación de valor y el uso eficiente de tales recursos.

Las ideas básicas que dan vida al concepto del Gobierno Corporativo han sido resumidas por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico en una serie de principios rectores:

  • La protección de los derechos de los accionistas de la organización.
  • El tratamiento equitativo de todos los accionistas independientemente de su cuota parte.
  • La posibilidad efectiva de reparación al accionista del daño provocado por la vulneración de sus derechos.
  • La promoción de la cooperación activa en la generación de riqueza y de empleo en el marco de la construcción de empresas sólidas y sustentables.
  • La revelación oportuna de datos financieros y de administración.
  • El monitoreo del equipo directivo por parte de la alta administración como parte del lineamiento estratégico organizacional.

Desvío de fondos, conflictos de intereses, sobornos, apropiación de inventarios, falsas rendiciones, sobrefacturación de mercancías,  entre muchos otros son parte de los tantos fraudes comunes que tienden a incrementarse en etapas de recesión económica en las que las necesidades de las personas aumentan y los mecanismos de control se hacen insuficientes para prevenirlos.

Las organizaciones que han implementado sistemas de administración de riesgo de fraude han logrado protegerse del riesgo de pérdida monetaria mayor, de publicidad negativa y hasta de acciones punitivas.

En este orden de ideas, las normas del Buen Gobierno Corporativo articulan:

  • Las líneas rectoras en la toma de decisiones por parte de la dirección estratégica general: nombramientos de ejecutivos, fusiones, inversiones y adquisiciones, entre otras.
  • Los medios de control: sobre el cabal desempeño de la dirección ejecutiva y la puesta en marcha del plan estratégico corporativo a tal fin.
  • Compliance o cumplimiento normativo: el establecimiento de procedimientos, políticas y estrategias que garanticen el cumplimiento del marco normativo al cual se encuentran sujetos tanto la organización como sus dependientes.
  • El consejo de administración, la junta directiva y los accionistas: sus relaciones, derechos y deberes.

En la medida en la que se profesionalice la gestión operativa y el gobierno corporativo, el éxito y el crecimiento continuado serán garantizados en la misma proporción, que se reflejará en:

  • el restablecimiento de la confianza de los inversores.
  • el incremento en el acceso hacia el crédito extranjero
  • el fomento de la imagen de marca
  • la atracción de talento, todo haciendo que las empresas sean más atractivas como oportunidad de negocio, más sostenibles desde el punto de vista económico y en consecuencia más competitivas.

El Gobierno Corporativo asegura la sana práctica corporativa, brindando al inversor mayor seguridad, transparencia, información y confianza en el mercado, es a todas luces más que un modismo, un elemento imprescindible para la sostenibilidad y el crecimiento empresarial.

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